La Ruta del Pincho y la imputación del Alcalde marcaron un pleno que parecía tranquilo. Y es que incluso había pocos puntos en el orden del día, alguno de trámite, que fueron aprobados en su totalidad.
Una modificación de créditos con cargo a remanentes de tesorería, una resolución del contrato de soportes publicitarios. IU presentó una propuesta sobre eliminación del uso del herbicida glifosato en los espacios públicos de Villaviciosa y otra sobre la incorporación de Villaviciosa de Odón a la red de municipios de la FEMP de acogida a refugiados.
El PSOE habló sobre la modificación del convenio con la Universidad Europea de Madrid para incluir becas de otras titulaciones y cubrir las de doble grado.
Se Puede, por su parte presentó la moción para la recuperación del servicio Centro de la Juventud y la propuesta para la puesta a disposición de las viviendas de entidades rescatadas en manos de los organismos municipales competentes.
Por último, Ciudadanos propuso el soterramiento de las líneas de alta y muy alta tensión que afectan a nuestro municipio.
Hasta ahí todo tranquilo. Luego se votó la presentación con carácter de urgencia de una moción de Vox sobre la ruta del Pincho. Aprobada la urgencia, empezó la exposición de Ernesto Serigós en que consideró que los motivos alegados por el concejal de Comercio Agustín Reguera (falta de personal y de presupuesto y no disponer de ningún cargo de confianza) en una entrevista a una cadena de radio no son suficientes para resignarse a perder un certamen pionero en la región y que ya se ha convertido en una costumbre arraigada en nuestro municipio y supone un importante revulsivo para nuestras Pymes y una atractiva oferta de ocio para vecinos y visitantes. Todos los grupos fueron incidiendo en la necesidad de mantener el certamen e incluso alguno indicaba “que se le caía la cara de vergüenza cuando le preguntaban el porqué de la anulación en un municipio con más de 250 funcionarios.
Llegó el turno del Concejal, visiblemente nervioso, y volvió a argumentar la falta de personal como el motivo de la anulación. Es más, después de enumerar una prolija cantidad de actividades que realizaba la Concejalía, llegó a decir que todas las actividades quedarían en suspenso ya que él, sin personal, no podía hacer nada. Como malició algún edil, a lo mejor, “es que se quiere suprimir la concejalía y esta ha sido la excusa”. Llegó el turno de la votación y el PP se quedó sólo en su rechazo, quedando patente el esfuerzo de algunos a la hora de levantar el brazo por eso de la disciplina de voto. Aprobada la moción, algunos ediles se ofrecieron a ayudar en todo lo posible –con lo que hiciera falta- para recuperar un evento que nunca tuvo que llegar a debatirse.
Veremos en que termina.
En el capítulo de ruegos y preguntas, tras el turno de UPyD en que se lamentaba que no se le diese contestación a sus preguntas, IU preguntó si se había hecho llegar a la Consejería de Educación el acuerdo de pleno sobre la reducción de plazas en infantil. En su segunda pregunta empezó el lío. Se pidió al Alcalde la dimisión por su imputación por el Juez Ruz, montándose un gran revuelo, con subidas de tono. En medio del caos, consiguió el PSOE hacer el ruego para que se endurezcan las sanciones por abandonar excrementos caninos en la vía pública,y una pregunta sobre el Consorcio y la línea con Ciudad Jardín. Se Puede iba a preguntar sobre la pista de Skate pero ya había sido contestado previamente por la Concejala de Juventud por lo que volvió a la carga con el Alcalde con fina ironía y…más revuelo. Ciudadanos apuntó la necesidad de que las actas de los plenos fuesen colgadas con más rapidez y finalmente Vox remató con la famosa carta a los comerciantes… y ahí ya, los gritos, acusaciones y demás “lindezas” acabaron con la amenaza del Alcalde de una querella ante el Fiscal General del Estado contra el portavoz de IU si no se retractaba de unas afirmaciones sobre la venta de armas a Venezuela.
Entretenido pero ¡lamentable espectáculo!
Foto de Portada: Círculo de Opinión